El gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, fue entrevistado por Feinmann sobre el ajuste de Milei e insistió con la importancia del dialogo.
La visita de Victoria Villarruel y Guillermo Francos a Salta suponía una puerta abierta al dialogo. En rigor de verdad, nada de esto sucedió pues lo dicho por los funcionarios del Gobierno Nacional fue muy poco, más bien casi nada. Villarruel habría mandado a los gobernadores a hablar con Macri y Francos defendió el ajuste de Javier Milei, por lo que no dejaron respuesta alguna para los reclamos de los mandatarios provinciales.
Tras la foto, el gobernador de Salta, Gustavo Sáenz le concedió una entrevista a Eduardo Feinmann en donde habló de las reuniones y de las problemáticas que sacuden a nuestra provincia, confirmando el peor detalle, del que mucho se suponía, pero poco se sabía: “Faltan medicamentos oncológicos, los módulos focalizados para los wichis, convenios que tienen años”.
Sobre la visita de los referentes libertarios, el mandatario salteño opinó: “Me parece que, si vinieron el ministro y la vicepresidenta a Salta, es un gesto del presidente de querer mostrar que hay apertura al diálogo y de parte nuestra también. Después de haber recibido tantos cachetazos”.
Con un poco de esperanza, espera que este primer acercamiento por lo menos suavice al presidente Javier Milei que lo trató de “traidor” a él, como a otros gobernadores y diputados.
Sin respuestas sobre el incentivo docente y sosteniendo la quita de subsidios. Sáenz, en otro apartado de la entrevista, aseguró que “se complicará”, refiriéndose a lo que podría suceder si el líder del Ejecutivo Nacional mantiene su intransigencia, agregando que será una pérdida para el salario docente y un aumento en las tarifas, como sucede con el colectivo que llegaría a los 1000 pesos.