El ministro de Economía de Milei, Luis Caputo, envió un adelanto del Presupuesto 2.025 y siguen pagando los mismos de siempre.
Luis “Toto” Caputo, calificado como el Messi de las finanzas por el presidente de la Nación, Javier Milei, envió al Congreso un adelanto de lo que sería el Presupuesto 2.025. En el mismo, se aportan cifras que plantean un escenario preocupante con devaluación, inflación, más impuestos y la inevitable recesión con una fuerte caída del consumo.
El Gobierno Nacional busca sostener el déficit cero con estabilidad macroeconómica. Al mismo tiempo, aseguran que mantendrán la política social sin intermediarios, ampliando la asistencia social y “proteger el poder adquisitivo de las jubilaciones y pensiones”, cosa que hasta acá no se vio. Asimismo, contempla la modernización del Estado y el equipamiento en seguridad y defensa, otra prioridad del gobierno de los F-16.
Los indicadores aportados por el ministro de Economía plantean un panorama para nada alentador. De entrada, adelanta que el tipo de cambio con el dólar se eleva a $ 1016,1 (+58,3% interanual) y la inflación proyectada al inicio del proceso de elaboración del presupuesto se ubicaba en un 139,7% interanual para diciembre de 2024.
Otra de las promesas de los libertarios era bajar impuestos y en este sentido, se preparan para bajar la presión tributaria, luego de implementar el impuesto al salario. Según consignó Infobae, la presión tributaria pasaría de 21,61% del PIB en el año 2024 a 21,16% en el año 2025, sí, un miserable 0,45%, radicado en la supuesta finalización del impuesto PAIS.
Sin cortarse los brazos, Milei confirma que seguirán subiendo los impuestos a los combustibles, aun cuando el consumo de este rubro sigue en caída libre, Caputo promete que los ingresos por el impuesto a los combustibles y al Dióxido de Carbono crecerían un 136,1% respecto de 2024.
Así también, señala que Argentina mantendrá sus esfuerzos para optimizar su cartera de operaciones con financiamiento internacional acompañando los lineamientos propuestos de prudencia fiscal y presenta el Plan Nacional de Inversiones Públicas 2025- 2027 que estará basado en un cálculo de las brechas sectoriales de infraestructura.