La ex presidenta publicó duras críticas al Gobierno de Milei y Caputo la mandó a callar.
En un extenso documento, Cristina Fernández expuso duras críticas al Gobierno Nacional que conduce Javier Milei. Uno de los principales ejes, fue la deuda que salpica a Luis “Toto” Caputo, ex ministro de Macri y actual ministro de Economía. Molesto, el funcionario ahora libertario, hizo su descargo en la red social X y mandó a callar a la ex presidenta.
“La invito a tener un poco de dignidad y permanecer callada mientras los argentinos de bien hacen el enorme esfuerzo de soportar y superar el desastre económico de sus últimos 4 años de gobierno, sin duda el peor de la historia argentina”, resaltó.
Por supuesto, Cristina Fernández lejos de quedarse callada, redobló la apuesta: “Buen día señor Ministro. No es el primero de su familia que intenta hacerme callar. Solo en un país con este Poder Judicial usted puede volver a ser funcionario público”.
La referencia familiar que hace la expresidenta tiene que ver con el ataque que sufrió el 1 de septiembre de 2022 en la puerta de su departamento en el barrio porteño de Recoleta. En aquel momento, la querella acusó a la agrupación Revolución Federal y el financiamiento que, según planteó, recibió de la empresa Caputo Hermanos, propiedad de familiares de un exalto funcionario de Mauricio Macri, Luis Caputo.
Caputo la siguió y apuntó un tweet más a Cristina Fernández aunque con muy pocos argumentos: “Siga en su mundo paralelo señora”.
Las críticas de CFK
La ex presidenta criticó duramente al ministro en el documento de 33 páginas que publicó este miércoles en sus redes sociales, al decir que a pesar de que Milei sostuvo “como caballito de batalla que con los ‘mismos de siempre’ no se podían obtener resultados distintos, produjo, ni bien fue electo, un insólito reciclaje de personajes y ex funcionarios. El más preocupante es el de Luis Caputo, artífice del endeudamiento serial del gobierno de Mauricio Macri y del retorno del FMI a la Argentina, a quien nombra, nada más ni nada menos, que como Ministro de Economía”.
Además, criticó su plan económico: “Hasta el momento, el nuevo gobierno sólo ha desplegado un feroz programa de ajuste que actúa como un verdadero plan de desestabilización y que no solo retroalimenta el espiral inflacionario colocando a la sociedad al borde del shock, sino que además provocará irremediablemente el aumento de la desocupación y la desesperación social en una suerte de caos planificado. Es más que evidente que en la cabeza del Presidente el único plan de estabilización es el de la dolarización. No se explican las medidas adoptadas en otro marco teórico”.
Respecto al déficit fiscal que mencionó Caputo, Fernández de Kirchner sostiene que este no es el principal problema de la Argentina y que la emisión monetaria, necesaria para cubrirlo, no es la causa de la inflación.
Y ejemplificó: El mundo demuestra que esta tesis no tiene sustento en la realidad. La publicación inglesa The Economist informa regularmente los principales indicadores económicos de 43 países agrupados por regiones, entre los que incluye a la Argentina junto a los países más desarrollados del mundo. De ese listado sólo tres países tienen superávit fiscal”.
“Sin embargo, de los cuarenta países restantes que tienen déficit fiscal, sólo la Argentina tiene una inflación anual de tres dígitos, tres países tienen inflación anual de dos dígitos y los treinta y seis países restantes tienen una inflación anual de tal sólo un dígito. Si la tesis que sostiene, entre otros, el presidente Javier Milei, fuera correcta, es indudable que todos esos países que tienen déficit fiscal deberían tener muy altos índices de inflación”, añadió.
Para la ex presidenta de la causa de la inflación en Argentina es la escasez de dólares y el endeudamiento excesivo en esa moneda.
En este sentido, citó un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), el cual plantea que es necesario generar fondos anticíclicos para evitar el uso reiterado de la emisión monetaria y que el endeudamiento por encima de las posibilidades del Estado, es también un antídoto contra la inflación.”
Y destacó: “Los seis años de superávit fiscal a los que se refiere el informe del IARAF corresponden al período 2003-2008, con gobiernos peronistas e industrialistas que habían administrado la cuestión de la deuda externa con la comprensión que la escasez de dólares en Argentina tensiona la economía, la política y las instituciones a límites insoportables, y dispara la inflación”.