El presidente de la Nación, Javier Milei, viajará a Miami para convertirse en Embajador de la Luz.
El 8 de abril, el presidente Javier Milei viajará a Estados Unidos para recibir la distinción de Embajador de la Luz de parte de la comunidad Jabad Lubavitch. Será el tercer viaje que realiza a dicho país desde que fue electo. Se espera que también se reúna con empresarios.
La visita de Milei será en el marco de la inauguración del Centro Menachem Mendel Schneerson, según pudo confirmar Noticias Argentinas con fuentes oficiales.
La condecoración será por “sus incansables esfuerzos por Israel y la comunidad global” y “honrando su inquebrantable dedicación a difundir la libertad, la esperanza y la positividad frente a la oscuridad”, dice la invitación. Además, incluye a la secretaria General de la Presidencia y hermana del jefe de Estado, Karina Milei.
El mandatario nacional también desplegaría una agenda de reuniones en suelo norteamericano, principalmente, empresariales. Milei estaría acompañado por el embajador argentino en Washington, Gerardo Werthein, y el rabino Axel Wahnish, quien será el nuevo diplomático nacional en Israel.
Cuando reciba la distinción, el Presidente tiene previsto dar un discurso que servirá para ratificar su compromiso con Israel y su reclamo para que el grupo terrorista palestino Hamás libere a todos los secuestrados el 7 de octubre.
Sobre la distinción
La condecoración que recibirá en esta oportunidad será entregada por la comunidad Jabad Lubavitch, del rabino Menachem Mendel Schneerson, conocido como “El rebe”, quien nació en Ucrania (Imperio Ruso) en 1902 y fue uno de los líderes judíos más importantes del siglo XX, considerado milagroso y referente a nivel mundial.
Fue el séptimo líder de la dinastía de Jabad Lubavitch y sus seguidores lo definen como “la más grandiosa personalidad judía”. Por muchos es reconocido por su trabajo para promover la conciencia y despertar espiritualmente el judaísmo a través de los 4.500 centros de Jabad en todo el mundo.
Rebe llegó en 1941 a los Estados Unidos. Rápidamente se convirtió en el séptimo (y último) líder de la dinastía jasídica Jabad-Lubavitch.
En la comunidad judía se lo recuerda como una figura que renovó la religión y que “ha inspirado y llevado consuelo espiritual a quienes lo conocieron en vida”. Desde su fallecimiento en 1994 en Nueva York, se le atribuye ser el mediador de numerosos milagros de índole diversa.
Luego de su muerte, el Ohel (carpa) se transformó en un centro de peregrinación al que llegan –según páginas web de la comunidad judía- unas 400 mil personas al año de las más diversas extracciones políticas, sociales y religiosas.