Trabajadores de todo el país miran los piquetes en Misiones como un faro de luz contra el ajuste.
La situación de todos los argentinos se complica día tras día y mientras el presidente Javier Milei sigue creando enemigos y peleas para distraer, el tiempo de tolerancia se termina casi con la misma velocidad que el salario de cualquier ciudadano de a pie. Los bajísimos salarios fueron la chispa que desató las protestas en Misiones que ya llevan su cuarto día y sorprenden a todos por su masividad.
Lo que comenzó con el acuartelamiento de la fuerza provincial y protestas docentes, se convirtió en una serie de piquetes a los que se sumaron trabajadores sanitarios y yerbateros. Las calles de Posadas y de otras importantes ciudades, se llenaron y es el método piquetero, una vez más, el que demuestra la fuerza imparable de los trabajadores. Ahora, todo el país mira el Misionazo como un faro para enfrentar el brutal ajuste que desencadenó Milei para pagar la fiesta de la casta que ahora lo acompaña a todos lados.
Hace instantes, los policías rechazaron el ofrecimiento del Gobierno de Misiones para un aumento del 15%, mismo rechazo que expresaron los otros sectores, por lo que la protesta continúa. Está claro que, en el medio del infierno de incrementos que desataron los libertarios en el Ejecutivo Nacional, el 15% resulta más que paupérrimo.
Todos de pie
La terrible situación de los trabajadores de la educación en Misiones despertó nuevamente la acción sindical. La Confederación de Trabajadores de la Educación (CTERA) convocó al Paro Nacional para este jueves 23 de mayo.
Entre las varias consignas exigen que los legisladores debatan el financiamiento universitario y restitución del FONID.
“La falta de respuestas han ocasionado pérdida del poder adquisitivo de nuestros salarios – desde diciembre de 2023 hay docentes con salarios de 250 mil pesos -, desfinanciamiento educativo en todas las áreas, ocasionando y profundizando los conflictos provinciales, ante la ausencia del Estado como garante del piso salarial docente y los recursos necesarios para el funcionamiento del sistema educativo”, explicaron desde la central gremial.
Varias provincias ya manifestaron su adhesión y crece la fuerza de la mano de la organización de los trabajadores.
CTERA exige:
- Urgente convocatoria a la Paritaria Nacional Docente.
- Restitución del FONID- que implica una disminución del salario entre un 10 % y un 20 %.
- Financiamiento para las escuelas y las universidades públicas.
- Más Presupuesto Educativo.
- Envío de recursos para infraestructura escolar.
- Envío de fondos para comedores escolares.
- Financiamiento para Programas Educativos.
- Urgente aumento de emergencia a los salarios de las docentes y los docentes jubilados.
- No al traspaso de las Cajas Provinciales a la Nación.
- No a la modificación de los Regímenes Jubilatorios Docentes Nacionales y Provinciales.
- Cese de los despidos y reincorporación de todos los trabajadores despedidos en las áreas educativas de la Nación.