Los trabajadores municipales exigen la recomposición salarial con un piso salarial que supere los 400 mil pesos.
La crisis económica impacta de lleno en las familias trabajadoras y los sectores más vulnerables. Con una canasta básica que supera los 800 mil pesos, cada vez más argentinos caen en la pobreza y en muchos casos los salarios quedaron incluso por debajo de la línea de indigencia, fijada en $ 386.978 para el mes de mayo. Por esto, los trabajadores municipales de Tartagal exigen una recomposición salarial inmediata.
De acuerdo a lo que explicó el dirigente Fermín Hoyos, “el básico para un trabajador promedio es de $239 mil y lo que la asamblea exigió es que ese mismo salario se eleve a $439 mil”, por lo que solicitan un incremento del 80%.
Lo cierto es que el pedido de los trabajadores se encuentra muy alejado de la oferta realizada por parte de la intendencia que conduce Franco Hernández Berni, quienes proponen un paupérrimo incremento del 20%.
“El secretario de Hacienda y el jefe de Gabinete me preguntaron si nos estábamos burlando de ellos, cuando vieron que el acta establecía un aumento de un 80 por ciento para los meses de junio, julio y agosto”, señaló el referente de ATE en el norte provincial, y añadió “yo le presenté a los funcionarios el escrito y respondieron lo que yo me imaginaba que iban a responder: que era imposible y que no había ninguna posibilidad de otorgar ese aumento”.
Ante esta negativa por parte de los funcionarios de Hernández Berni, los trabajadores encienden las alertas y esperan una negociación que sirva para aliviar la grave situación que atraviesa la familia municipal.