Desde la UNSa flexibilizarán exigencias académicas para contrarrestar el efecto del ajuste de SAETA.
El Consejo Directivo de la Universidad Nacional Salta (UNSa) analizó el impacto de los últimos requisitos que SAETA y la Autoridad Metropolitana del Transporte (AMT) aplicaron para acceder al boleto estudiantil gratuito. En la reciente reunión se discutieron y esgrimieron estrategias internas para paliar la situación que, aseguran, llevó a que haya “aulas vacías”. Por ello, informaron, se decidió flexibilizar los requisitos académicos para no perder la regularidad. La medida seguramente causará polémica.
“Hay una gran preocupación”, marcó el vicerrector de la UNSa, Nicolás Innamorato. “La universidad está prácticamente vacía”, agregó y aseguró que está relacionado directamente a la limitación del boleto estudiantil.
Saeta exige que el estudiante tenga dos materias aprobadas por año para acceder al boleto estudiantil gratuito. Además de advertir que es un “derecho otorgado por ley provincial”, Innamorato cuestionó el criterio para limitar el acceso al beneficio ya que “un alumno regular no es aquel que tiene dos materias aprobadas”.
Según difundieron los centros de estudiantes, hoy habrá una reunión con el ministro de Gobierno, Ricardo Villada, autoridades de la UNSa, Saeta y la AMT.
En diálogo con El Tribuno, Innamorato señaló que las restricciones que se fijaron desde este año afectan principalmente a los dos extremos del proceso académico: a los ingresantes y a quienes están cerca de finalizar su carrera. “Tenemos entre 20 y 25 mil alumnos y de ellos, el universo de ingresantes y estudiantes avanzados, son cerca de 10 mil”, graficó sobre la representación de los afectados. Entre ellos, incluyó a quienes cambian de carrera, la retoman o tienen que hacer sus tesis y prácticas profesionales.
El alumno regular, indicó, no es quien tenga dos materias aprobadas, sino el que “esté inscrito y tenga un trayecto formal educativo, formativo y académico certificado por las unidades académicas de la UNSa”. Innamorato precisó que en el caso del ingresante , “no tiene trayectoria académica y puede suceder que no pudo rendir porque debe cursar, regularizar. No se le puede negar por cuanto está iniciando su carrera. También para reingresantes que dejan la carrera, o en el caso de una persona que se incorporó a una carrera específica aprobó las dos materias y se cambia de carrera”.
Mientras que para los que están cerca de diplomarse, indicó que “están haciendo la tesis que lleva entre 1 año y diez meses y por lo que se transforma en una necesidad para ir a las consultas con directores de tesis y aún muchos no trabajan”.
Por estos motivos, aseveró, desde el Consejo Directivo de la casa de altos estudios se reunieron “para flexibilizar las exigencias académicas, por ejemplo, que aquellos que faltan a dos trabajos prácticos pierden la regularidad”, aseveró.
Sobre la reunión de hoy, el vicerrector expresó: “Tenemos el acompañamiento del gobernador para zanjar la situación”.