La considerable baja del consumo hace sentir el brutal ajuste de Milei sobre los salarios.
Los resultados del impresionante aumento de precios ya se sienten. La caída del consumo y un comercio al borde de la quiebra, pintan un panorama desolador. Los locales en el macrocentro comienzan a vaciarse, miles de puestos de trabajo en riesgo y los despidos que comienzan a formar los desocupados de Javier Milei.
La realidad es que la caída responde directamente a la pérdida del poder adquisitivo. Quienes todavía conservan su trabajo, apenas si llegan a comprar lo básico para sobrevivir junto a sus familias.
La Cámara De Las Pequeñas Empresas Y Comercios (CAME) informó que el nivel de ventas de esos negocios cayó 28,5% solo en enero y con los incrementos en los servicios, más la última suba de la nafta, se espera que todo siga en caída libre.
Desde la Cámara de Comercio, los referentes buscan cómo hacer para conseguir algún beneficio impositivo y apuntan al Ente Regulador de los Servicios Públicos o a la Municipalidad de Salta, para que alivie la carga que hoy tiene a varios negocios al borde de la quiebra.
En rigor de verdad, el ajuste se está llevando puesto a trabajadores, jubilados, comerciantes y emprendedores, pero quienes también comienzan a sentirlo son las inmobiliarias. Las celebraciones por el fin de la ley de alquileres fueron de corta duración, ahora, los locales comerciales se van vaciando y no hay incautos que caigan en los requisitos leoninos de los empresarios de bienes raíces.