El diputado libertario aseguró que “cayó en medio de un lobby de dos tabacaleras” y operan en su contra.
La polémica desatada a raíz del Fondo Especial del Tabaco (FET) desató una serie de idas y vueltas en las que se involucró el gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, con un fuerte mensaje hacia el presidente Javier Milei y salpicando a un grupo de diputados, señalados como lobbystas de las tabacaleras.
Si bien no lo nombró entre sus posteos, cualquiera podría suponer que, entre los diputados apuntados, se encuentra el olmedista devenido en libertario, Carlos Zapata.
Siendo así, el legislador de Ahora Patria cruzó fuerte al gobernador y trató de explicar lo sucedido con las tabacaleras. Sobre las acusaciones en su contra, aseguró que todo se trata de una operación en su contra, resaltando que lo único que quiere es “mejorar la recaudación” para que todas paguen lo mismo.
“Caí en medio del lobby de dos grandes del sector como son Sarandí y Massalín”, indicó Zapata en una entrevista con Radio Salta.
Asimismo, Zapata denunció públicamente que quisieron coimearlo, no sin antes arremeter contra el mandatario provincial: “Yo no soy cagón como el gobernador, yo sí doy nombres”. Sobre esto, contó que recibió una convocatoria de Darío Pulenta, quien sería, director de Asuntos Externos en Philip Morris International.
“Él quería que me junte a acordar y lo mandé a vender almanaques”, aseveró.
Cabe resaltar que ésta denuncia se hizo en la entrevista con el medio antes mencionado, de acuerdo a lo que publica El Intra, por lo que no se exhibió la denuncia formal contra ésta práctica que involucra a un representante del pueblo.
“El Presidente de la Nación no se mete en estas cuestiones, solo da el ok como me lo dio el sábado y se lo dio a la diputada Marcela Pagano. Después, algunos interpretan que la opinión del Presidente es otra. Bueno, que se hagan cargo los que interpretan otras cuestiones. O le mienten en algún caso al Presidente. Yo soy muy responsable en estas cosas”, señaló.